HISTORIA 1931 - 1984
Después de una lenta pero constante reconstrucción del negocio, Arthur Espey se hace cargo de L.W. Cretschmar como propietario en 1931 y se convierte así en la nueva cabeza de la compañía.
Después de fundar una sucursal en Hamburgo en 1935, la empresa entra en el segundo siglo de su existencia en 1936. Solidez, fiabilidad y movilidad son ya entonces los cimientos de la filosofía corporativa en aquella época. Un año más tarde, en 1937, se funda la sede de Wuppertal.
La Segunda Guerra Mundial interrumpe casi todas las actividades de la empresa: gran parte de los edificios de la empresa sufren graves daños o quedan completamente destruidos.
Después del final de la guerra, Cretschmar se hace cargo del almacenamiento de alimentos para el gobierno estatal y organizaciones benéficas, así como de la distribución centralizada de los paquetes de ayuda humanitaria.
En los años inmediatamente posteriores a la guerra, Cretschmar establece una sucursal en Bremen, abre un servicio regular entre el Rin y Londres y pronto le siguen envíos a Dinamarca, Suecia, España y Portugal.
Artur E. H. Espey, hijo del propietario, se incorpora a la empresa en 1951 como apoderado.
A finales de los años 50, la reorientación del sector del transporte lleva a un aumento de los flujos de tráfico de buques a camiones; en 1957, se completa el nuevo almacén de cereales y carga general de Düsseldorf, con una capacidad de 14.200 toneladas.
En 1959, Cretschmar se traslada a un nuevo edificio administrativo en la Franziusstraße 2, en la zona portuaria de Düsseldorf. El correo por tubo neumático y las teleimpresoras son la expresión de la más moderna tecnología de la época.
El presidente, Arthur Espey, comenta a colación del 125.º aniversario de la empresa: “Ya sea por mar, ferrocarril, carretera o aire: L.W. Cretschmar se considera hoy fideicomisario, asesor, organizador y mediador de la industria del transporte de carga”.
En los años 60, las líneas regulares directas de los camiones de Cretschmar conducen a muchas capitales europeas; la sede de Wuppertal se convierte en un eje central para el tráfico de grupaje europeo.
Cretschmar Española se constituye en 1968 en Madrid, con oficinas propias en Barcelona e Irún, lo que supone el inicio del creciente negocio de Cretschmar en el sur de Europa.
La sucursal de Wuppertal se ha convertido en un eje central del transporte de grupaje. En 1972, el nuevo centro de expedición de Wuppertal-Nächstebereck está listo para ser ocupado. Desde aquí operan servicios regulares a muchas ciudades de Europa occidental.
Los años siguientes se caracterizan por la expansión del negocio y la mejora de los servicios en todas las áreas. Así, en 1979 Cretschmar construye un almacén de 10.000 metros cuadrados en la Paul-Thomas-Straße de Düsseldorf.
En 1983 se pone en marcha en Hamburgo una instalación de expedición para la gestión de transporte de grupaje nacional e internacional.
La compra de un silo de cereales y de modernas naves de expedición en Neuss son las inversiones que marcan los años 1983 y 1984.